El presidente del Miss Earth Venezuela celebra a la ganadora del Miss Supranational mientras se prepara para coronar a la sucesora de Diana Silva, actual reina del concurso que encabeza.
Prince Julio César celebra a la ganadora de la primera edición del Miss Supranational mientras se prepara para coronar a la sucesora de Diana Silva, actual reina del Miss Earth Venezuela, concurso que preside junto con Alyz Henrich.
–¿Cuál considera ha sido la evolución más grande que ha experimentado el Miss Earth Venezuela?
–El hecho de que, desde 2017, el público, los televidentes y las redes hablaran de dos certámenes de belleza. Uno, el que ya conocemos y el otro, el Miss Earth Venezuela. Al principio, esto era solo un proyecto que se cristalizó y llegó a ser una realidad, pero lo importante no es llegar sino mantener ese compromiso de calidad, de respeto y de escuela que tenemos con las muchachas. Creamos una nueva forma de hacer certámenes de belleza.
–Ya yo estoy molesto de escuchar que no son momentos para hacer. ¿Qué hacemos? Nos quedamos en casa, con los brazos cruzados, sin luz, sin agua, sin teléfono, sin nada. Si yo hubiese pensado de esa manera cuando fui diagnosticado con cáncer, me hubiese muerto. Soy un fiel creyente de que hay que seguir trabajando todos los días, hay que salir a luchar. Y me parece que la plataforma del Miss Earth Venezuela, como la de otros certámenes de belleza, es para empoderar a esa marca país que es Venezuela.
–¿De qué manera siente que el concurso que preside cambió el patrón de la belleza local?
–Desde la primera edición, el Miss Earth Venezuela ha procurado que sus candidatas sean chicas inteligentes, con un verbo bonito porque las mujeres venezolanas son inteligentes y debemos desarrollar eso mucho más. Las mujeres venezolanas van mucho más allá de la belleza, de medidas perfectas. Me interesa que vaya por ese perfil porque lo otro es tácito. Creo que ésa ha sido la gran diferencia. Ya basta de tanta perfección y estereotipos. Y estoy tan claro en lo que estoy diciendo que las nuevas administraciones de otros concursos han dado otros matices. Lo dicen Miss Earth, Miss Mundo, Miss International, Miss Universo. Están buscando mujeres que no tengan tanto peróxido en el cabello, con narices perfiladas y 90-60-90 sino que tengan contenido, poder sobre una masa y que digan somos seres humanos, tengo defectos, pero también muchísimas virtudes. Podemos ser lo que nos propongamos. Ese es el mensaje de ahora. ¿De qué vale que gane un mujerón que cuando le pones un micrófono no sabe hablar? Entonces viene otra que no es tan bella, pero tiene un verbo maravilloso y, te puedo asegurar, que va a ganar. Eso nos indica que los cánones han cambiado.
Prince Julio César destaca las labores sociales realizadas por las concursantes durante 2019. «Una de las innovaciones de este año ha sido esa ayuda que hemos llevado a las personas más necesitadas, como por ejemplo, la sanidad bucal, que es súper necesaria, y que pudimos cristalizar gracias a esa alianza que tiene Miss Earth Venezuela con sus patrocinantes. A través de nuestros cirujanos realizamos una labor muy bella porque logramos mejorar los rostros de tres niños venezolanos que tenían labio leporino. Y además, donamos 30 pelucas esas niñas diagnosticadas con cáncer.
–Ninoska Vásquez y Diana Silva conquistaron varios reconocimientos en sus ediciones, ¿Cuál sería la meta de la ganadora de este año?
–Ganar. Sería maravilloso, pero la meta de este año no es solamente ganar sino que la Miss Earth Venezuela se convierta en una mujer comprometida con su país. Esto no puede quedarse en foticos oficiales, en un programita en el que vean que estamos preparando las maletas para ir al Miss Earth; esto tiene que ir mucho más. Si queremos seguir cambiando los formatos de los certámenes de belleza, la mujer que se corona mañana como la nueva Miss Earth Venezuela debe estar involucrada con la realidad de su país. Es una cuestión de identificación. Y eso lo va a decir es la gente. Creo que eso es el mayor reto que tenemos este año.
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